MOVIE REVIEW: “Bagman” (2024)

avatar
(Edited)
(adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});

This publication was also writen in SPANISH and PORTUGUESE.

bagman01.jpg

IMDb

Synopsis: A family's life is turned upside down when a supernatural threat from the past returns to seek what it had not been able to achieve until then. Fighting against it is inevitable, and they need to find a way out as quickly as possible. However, the threat is “invisible”.

Our worst fears, somehow, remain “trapped” somewhere inside ourselves. How do you deal with them? In this movie, the psychological flirtation of a plot enveloped by a suspense based on a folklore that is very popular in some parts of the world takes center stage, inviting the audience to a plot that could have been much better developed than it ended up being. The potential of the story is great, but the “messy” and “uncommitted” execution with a depth of facts makes this project somewhat “boring” to watch.

bagman05.jpg

Cine Alerta

Modern horror cinema has definitely not found its own path yet. Year after year, studios have been betting on misguided approaches based on good concepts, and the result is movies with very generic formulas that fail to deliver what they had “promised”. Those who follow this movie genre more closely can sometimes even anticipate some events, because everything is “packaged” in a systematic way, with the same type of base material, and this movie is yet another example of this type of wrong choice.

Here, the McKee family is suffering from the presence of an evil “entity” that haunted (as a child) the life of the patriarch: Patrick. A fear fed by his own father, based on a popular folklore well known for being personified by the “man in the bag”. This time, the script “distorts” the idea of the man who captures children who disobey their parents by putting them in a bag and then “disappearing” them, with the idea of capturing children who are naturally good. An idea that was extremely poorly used, but that had some potential.

bagman03.jpg

AdoroCinema

When this threat comes back to haunt them, Patrick and Karina must find a way to destroy this evil, while protecting themselves and their young son Jake. In the midst of this struggle, they end up dealing with some types of mentally disturbing situations, and it is precisely within this spectrum that the script tries to build all of its narratives. However, the result is very fragile, because all the efforts to create a good story tend not to be sustained by a lack of connection between theory and practice within the idea that is proposed throughout the plot.

There are some moments when the script manages to be efficient, such as when it tries to explain to the audience the origin of this type of supernatural threat using situations that happened throughout history, and which, precisely because they have different types of interpretations, end up being something complex to understand. Although there are certain patterns involving the personification of the “bagman”, the way he is described and how he acts differently between generations. However, this moment of “narrative clarity” ends there, in a brief scene with little impact.

bagman04.png

WhatCulture

Despite trying to throw things in all directions, the plot fails to scare or bring the drama that would have been more relevant to the events. Even though it has a relatively “surprising” ending (since it is something that is not commonly seen in these types of movies), the result is too superficial and even though it is a 90-minute movie, it still takes a long time to make things happen. A very clear example of this is showing who the big threat is, because until then this was only shown at the beginning of the movie (and only through dry and quick takes).

Leading the cast is Sam Claflin, the only one who manages to stand out in the middle of all this well-intentioned mess by managing to convey convincing facial emotions (despite a few exaggerations). The rest of the cast tends to be very inexpressive, nullifying any feeling of empathy that could have arisen at some point. Generally speaking, only Claflin’s character stands out, and even though this is obvious, what orbits around him should have been given a more interesting approach because the other characters “talk” about him.

bagman02.png

Movies and Mania

Colm McCarthy is the director, and what he does here is too simple (even with its small touches of “boldness”) to be considered a minimally efficient horror movie. Bagman has a good setting, a functional suspenseful atmosphere and even good scenography in open spaces (its best technical aspects), but it also has an editing of scenes that is unfavorable to the rhythm of the plot and a “coordination of events” that loses all its purpose as the narrative evolution grows with a base that is relatively too sensitive.

[ OFFICIAL TRAILER ]


CRÍTICA DE PELÍCULA: “El hombre del saco” (2024)

Sinopsis: La vida de una familia da un vuelco cuando una amenaza sobrenatural del pasado regresa para buscar lo que hasta entonces no habían podido conseguir. Luchar contra esto es inevitable y necesitan encontrar una salida lo antes posible. Sin embargo, la amenaza es “invisible”.

Nuestros peores miedos, de alguna manera, quedan “atrapados” en algún lugar dentro de nosotros. ¿Cómo tratar con ellos? En esta película cobra protagonismo el flirteo psicológico de una trama envuelta en suspenso basada en un folclore muy popular en algunas partes del mundo, invitando al espectador a adentrarse en una trama que podría haber sido mucho mejor desarrollada de lo que finalmente fue. El potencial de la historia es grande, pero la ejecución "desordenada" y "poco comprometida" con la profundidad de los hechos hace que este proyecto sea algo "aburrido" de ver.

El cine de terror moderno ciertamente no ha encontrado su propio camino aún. Año tras año, los estudios apuestan por planteamientos equivocados basados en buenos conceptos, y el resultado son películas con fórmulas muy genéricas que no cumplen lo que “prometieron”. Quienes siguen más de cerca este género cinematográfico, a veces pueden incluso anticipar algunos acontecimientos, porque todo está “empaquetado” de manera sistemática, con el mismo tipo de material base y esta película es un ejemplo más de ese tipo de elección equivocada.

Aquí, la familia McKee sufre la presencia de una “entidad” maligna que acechó (cuando era niño) la vida del patriarca: Patrick. Un miedo alimentado por su propio padre, basado en un folclore popular muy conocido por estar personificado por el “hombre de la bolsa”. Esta vez, el guión “distorsiona” la idea del hombre que captura a niños que desobedecen a sus padres metiéndolos en una bolsa y luego “haciéndolos desaparecer”, en la idea de capturar a niños que son naturalmente buenos. Una idea que fue muy mal utilizada, pero que tenía cierto potencial.

Cuando esta amenaza regresa para perseguirlos, Patrick y Karina deben encontrar una forma de destruir este mal, mientras se protegen a sí mismos y a su pequeño hijo Jake. En medio de esta lucha, terminan lidiando con algunos tipos de situaciones mentalmente perturbadoras, y es precisamente dentro de ese espectro que el guión intenta construir todas sus narrativas. Sin embargo, el resultado es muy frágil, porque todos los esfuerzos por crear una buena historia tienden a no sostenerse en una falta de conexión entre la teoría y la práctica dentro de la idea que se propone a lo largo de la trama.

Hay algunos momentos en los que el guión consigue ser eficiente, como cuando intenta explicar a la audiencia el origen de este tipo de amenazas sobrenaturales utilizando situaciones sucedidas a lo largo de la historia, y que, precisamente por tener distintos tipos de interpretaciones, terminan siendo algo complejo de entender. Si bien existen ciertos patrones en torno a la personificación del “hombre del saco”, la forma en que se lo describe y cómo actúa difiere entre generaciones. Sin embargo, este momento de “claridad narrativa” termina ahí, en una breve escena sin mucho impacto.

A pesar de haber intentado disparar en todas direcciones, la trama no logra asustar y no logra aportar el drama que tendría más relevancia dentro de los acontecimientos. Aunque tiene un final relativamente “sorprendente” (ya que no es algo común en este tipo de películas), el resultado es demasiado superficial y, a pesar de ser una película de 90 minutos, aún tarda un poco en suceder cosas. Un ejemplo muy claro de ello es mostrar quién es la gran amenaza, pues hasta entonces esto sólo se mostraba al principio de la película (y sólo a través de tomas secas y rápidas).

Liderando el reparto está Sam Claflin, el único que consigue destacar en medio de todo este desastre bienintencionado al conseguir transmitir emociones faciales convincentes (pese a algunas exageraciones). El resto del reparto tiende a ser muy inexpresivo, anulando cualquier sentimiento de empatía que pudiera haber surgido en algún momento. En general, sólo destaca el personaje de Claflin, y aunque esto es obvio, lo que orbita a su alrededor debería haber tenido un enfoque más interesante porque los demás personajes “hablan” de él.

Colm McCarthy es el director, y lo que hace aquí es algo demasiado simple (incluso en sus pequeños toques de “atrevimiento”) como para ser considerado una película de terror mínimamente eficiente. El hombre del saco tiene una buena ambientación, una atmósfera de suspenso funcional e incluso una buena escenografía en espacios abiertos (sus mejores aspectos técnicos), pero también tiene un montaje de escenas desfavorable al ritmo de la trama y una “coordinación de acontecimientos” que pierde todo su propósito a medida que la evolución narrativa crece con una base relativamente demasiado sensible.


CRÍTICA DE FILME: “O Homem do Saco” (2024)

Sinopse: A vida de uma família vira de ponta a cabeça quando uma ameaça sobrenatural do passado volta para buscar o que não havia conseguido até então. Lutar contra isso é inevitável, e eles precisam encontrar uma saída o mais rápido possível. No entanto, a ameaça é “invisível”.

Nossos piores medos, de alguma maneira, continuam “presos” em algum lugar dentro de nós mesmos. Como você lida com eles? Neste filme, o flerte psicológico de uma trama envelopada por um suspense baseado em um folclore muito popular em algumas partes do mundo ganha o centro das atenções, convidando o público para uma trama que poderia ter sido muito melhor desenvolvida do que acabou sendo. O potencial da estória é ótimo, mas a execução “bagunçada” e “descompromissada” com uma profundidade dos fatos torna este projeto em algo meio “enfadonho” de ser assistido.

O cinema de horror moderno definitivamente ainda não encontrou o seu próprio caminho. Ano após ano, os estúdios apostam em abordagens equivocadas com base em bons conceitos, e o resultado disso são filmes com fórmulas muito genéricas e que não conseguem entregar o que havia “prometido”. Quem acompanha em esse gênero cinematográfico mais de perto, em alguns momentos consegue até antecipar alguns acontecimentos, porque tudo está “embalado” de um jeito sistemático, com o mesmo tipo de material base e este filme é mais um exemplo desse tipo de escolha errada.

Aqui, a família McKee está sofrendo com a presença de uma “entidade” maligna que assombrou (enquanto criança) a vida do patriarca: Patrick. Um medo alimentado pelo seu próprio pai, baseado em um folclore popular muito conhecido por ser personificado pelo “homem do saco”. Desta vez, o roteiro “distorce” a ideia do homem que captura as crianças que desobedecem aos seus pais ao coloca-las em um saco e, em seguida, “desparece” com elas, pela ideia da captura das crianças que são naturalmente boas. Uma ideia que extremamente mal aproveitada, mas que tinha certo potencial.

Quando essa ameaça volta para assombrá-los, Patrick e Karina precisam encontrar uma maneira de destruir esse mal, enquanto protegem a si mesmos e o seu pequeno filho Jake. No meio dessa luta, eles acabam lidando com alguns tipos de situações mentalmente perturbadoras, e é justamente dentro desse espectro que o roteiro tenta construir todas as suas narrativas. No entanto, o resultado é muito frágil, porque todos os esforços em criar uma boa estória não tendem a ser sustentados por uma falta de conexão entre a teoria e a prática dentro da ideia que é proposta ao longo da trama.

Há alguns momentos em que o roteiro consegue ser eficiente, como por exemplo, quando tenta explicar ao público a origem desse tipo de ameaça sobrenatural usando situações que aconteceram ao longo da história, e que justamente por terem diferentes tipos de interpretações, acaba sendo algo complexo de ser compreendido. Embora existam certos padrões envolvendo a personificação do “homem do saco”, o modo como ele é descrito e como ele age diferente entre as gerações. No entanto, esse momento de “claridade narrativa” acaba por aí, numa cena breve e sem grande impacto.

Apesar de ter tentado atirar para todos lados, a trama não consegue assustar e nem consegue trazer o drama que teria uma mais relevância dentro dos acontecimentos. Mesmo tendo um final relativamente “surpreendente” (por ser algo que não é comumente visto nesses tipos de filmes), o resultado é superficial demais e mesmo sendo um filme com 90 minutos de duração, ainda demorar para fazer as coisas acontecerem. Um exemplo muito claro disso, é mostrar quem é a grande ameaça, porque até então isso só foi mostrado no início do filme (e apenas através de takes secos e rápidos).

Liderando o elenco está Sam Claflin, o único que consegue se destacar no meio de toda essa bagunça bem intencionada por conseguir imprimir emoções faciais convincentes (apesar de alguns poucos exageros). O restante do elenco tende a ser muito inexpressivo, anulando qualquer sentimento de empatia que poderia ter surgido em algum momento. De uma maneira geral, apenas o personagem do Claflin ganha um destaque, e mesmo que isso seja óbvio, o que orbita ao redor dele deveria ter ganho uma abordagem mais interessante porque os outros personagens “conversam” sobre ele.

Colm McCarthy é o diretor, e o que ele faz aqui é algo simples demais (mesmo os seus pequenos toques de “ousadia”) para ser considerado como um filme de horror minimamente eficiente. O Homem do Saco tem uma boa ambientação, um clima de suspense funcional e até uma boa cenografia em espaços abertos (seus melhores aspectos técnicos), mas também tem uma edição de cenas desfavorável ao ritmo da trama e uma “coordenação de acontecimentos” que perde todo o seu propósito à medida em que a evolução narrativa cresce com uma base que é relativamente sensível demais.

Posted Using INLEO



0
0
0.000
(adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});
3 comments
avatar

I love watching horror or thriller movies. But I cannot watched it alone hahaha. But this is an interesting movie.